Ana María Vera Haro, es titulada de la carrera de piscología, a la que ingresó en 1984 y se tituló en 1990. Ha tenido un rol importante en nuestra región en el área de género, interculturalidad y derechos humanos.

Actualmente se desarrolla como psicóloga en el Centro Comunitario de Rehabilitación en Las Quilas.

A continuación, te invitamos a conocer su paso por la universidad y los aportes que ha realizado en psicología comunitaria desde La Araucanía.

Recuerdos de vida universitaria

Llegué a Temuco a estudiar a la UFRO desde Punta Arenas, en tiempos muy convulsos, marcados por un movimiento estudiantil muy activo contra la dictadura militar, también llegué a la UFRO con muchas esperanzas de encontrar una profesión que me permitiera trabajar en distintos ámbitos tanto clínicos como sociales. Llegué a la tercera generación de la carrera de psicología después de más de tres días de evaluaciones y entrevistas en la etapa de selección, esas eran las exigencias en esos años.

Muchas personas dejaron huellas durante esa etapa formativa, recuerdo a la profesora Aracely Caro con sus clases de Antropología y un acercamiento al pueblo mapuche, desde el respeto por sus conocimientos y saberes, cuestionando el racismo de la sociedad chilena.

Ana (a la derecha de blanco) junto a sus compañeros de universidad en los años 80.

También me resulta inolvidable la Sra. Julia, una gran maestra del psicoanálisis que apoyaba sistemáticamente a estudiantes que realizábamos trabajos voluntarios en los barrios más precarizados de la época, ella generaba encuentros y conversaciones, intercambio de experiencias entre diversas organizaciones no gubernamentales, lo que facilitó en búsqueda de conocimientos que no se impartía en el aula.

La huella más profunda tal vez haya sido la autogestión del conocimiento, lo que nos permitió desarrollar nuestras motivaciones sociales y las capacidades necesarias para cumplir lo que deseábamos, a través de la organización. Uno de esos logros tuvo que ver con mi práctica profesional, la que realicé junto a un compañero y una compañera, quienes fuimos los primeros en realizar una práctica en el ámbito de la psicología comunitaria, la que aún no estaba institucionalizada en nuestra Carrera.

Fue tanta nuestra persistencia y porfía que nos recibieron en el Departamento de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Temuco para trabajar con Organizaciones Sociales y territoriales, desde el Modelo de la Animación Cultural y la Educación Popular. Mediante la autogestión levantamos un Centro Cultural que permaneció aproximadamente cinco años abierto convirtiéndose en un centro de práctica para un sinnúmero de estudiantes de distintas carreras de la UFRO.

Recorrido por el mundo laboral

Posteriormente a obtener la Licenciatura Psicología en la Universidad de La Frontera, he realizado diversos programas formativos en el área de Género, Interculturalidad, Derechos Humanos, entre otros.

Tengo 31 años de experiencia como psicóloga y psicoterapeuta en el ámbito de la salud mental, psiquiatría comunitaria y neurorrehabilitación en la APS de Temuco. Además, me he especializado en el trabajo en evaluación psicológica y de reparación en personas afectadas por la violencia y trauma psicosocial. Asesoro proyectos sobre derechos humanos desde la perspectiva de género y la interculturalidad.

Ejercí treinta años como docente en Carreras de Psicología, Terapia Ocupacional y Enfermería en diversas universidades regionales. He sido expositora en temáticas de Psicología Comunitaria y Psicología Política en varios Congresos latinoamericanos México, Ecuador, Argentina, Brasil y Chile. Soy miembro de la Sociedad Chilena de Psicología Comunitaria y coordino la Red de Peritos Independientes, una red de profesionales que realiza evaluaciones forenses con pertinencia cultural.

He recibido diversos reconocimientos. El 2017 recibí el reconocimiento de la Carrera de Psicología de la Universidad de la Frontera por representar Integralmente el Perfil del Psicólogo y aportar al desarrollo de la profesión y la disciplina, proyectando a la UFRO desde su quehacer. También recibí el premio por parte de las Organizaciones Ciudadanas y el Área de Género de la Municipalidad de Temuco por el trabajo realizado por los Derechos de las Mujeres el 2022, año en que también fui nominada por la Secretaría Regional Ministerial de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de La Araucanía, en conjunto con la Corporación de Desarrollo de La Araucanía como parte del Programa “Tesoros del Ñielol”. El 2023 me dieron el Reconocimiento del Municipio Ciudadano de Temuco por los 30 años de servicio público.

Ana junto al reconocimiento de la Carrera de Psicología de la Universidad de la Frontera (2017).

La vinculación es muy estrecha ya que la Atención Primaria en Salud es el nivel sanitario que está inmerso en los territorios y es la puerta de entrada de todas las personas que tienen necesidades en ese ámbito, específicamente, la demanda en salud mental ha sido creciente desde la pandemia en adelante. Cada vez más se hace más necesario entender la importancia del trabajo con pertinencia cultural y se constituye en un desafío comprender los valores y significados que le dan a las personas a sus procesos de salud enfermedad, por tanto, debe activarse un diálogo e intercambio más respetuoso y más simétrico entre los agentes de salud y las comunidades.

En el área de la psicología forense, hay muchos vacíos en cuanto a la vinculación con el territorio, ha sido muy lenta la transformación de los protocolos profesionales que deben usarse en personas de pueblos indígenas con el fin de realizar evaluaciones periciales culturalmente apropiadas con fines legales, así que ese es un camino por recorrer aún.

Sello UFRO

La experiencia formativa en la UFRO tiene un sello regionalista, y tempranamente una va aprendiendo la importancia de la solidaridad en el proceso de estudio, quizás porque la mayoría de los integrantes del curso eran de regiones diversas y nos necesitábamos unos a otros.

Aprendí el poder de la autogestión y las redes solidarias. Como agrupaciones de estudiantes pudimos movilizar recursos para realizar nuestro trabajo comunitario en las poblaciones, pudimos valorar la fuerza de niños, niñas y jóvenes como portadores de un potencial creativo, y reconocimos el poder que tiene el ámbito expresivo creativo en la dinamización social.

Derrocar la dictadura endógena (al interior de nosotros mismos y las comunidades), era el inicio de la etapa transicional, esto nos sirvió para dejar atrás la desconfianza, para derrotar los miedos de ocupar la calle y de juntarnos y recuperar las relaciones de confianza.

El otro legado que he ido valorando y cultivando con los años, son las amistades que nacieron en esa época de los ochenta y que hoy se han convertido en profundos vínculos de hermandad con quienes nos hemos acompañado tanto personal, como profesionalmente.

El aporte principal de la Universidad de La Frontera en la región, es ser catalizadora y facilitadora de los diálogos entre las personas que se forman en pregrado, en postgrado y sus territorios, la UFRO como universidad regional debiera comprometerse con la tarea de contribuir a la resolución de las problemáticas que afectan a la región, activando oportunidades, gestionando recursos, movilizando competencias para reducir las desigualdades y avanzar hacia una efectiva descentralización social, económica, política y cultural en el país. Creo que su aporte es clave en esta región.

A los futuros profesionales de la UFRO, les diría que comiencen desde la formación universitaria a prefigurar y trabajar por la sociedad que quieren vivir, que no se queden sólo como espectadores, el ser profesional, les da la gran oportunidad de tener un rol activo en la construcción del mundo que desean y que necesitamos para vivir mejor, y eso conlleva también una responsabilidad no sólo técnica si no sobretodo ética. Les invito a desplegar su rol con creatividad y autonomía, a ampliar sus competencias para proyectar un perfil profesional que aporte respetuosa y dinámicamente a sus entornos laborales, y que sostengan un método y motivación para el aprendizaje continuo y el autocuidado.