Camila Larraguibel es ufroniana ICI-I (2012), luego de titularse trabajó en el DIS UFRO, además de dictar algunas asignaturas como Gestión de Procesos de Negocios y Logística y Distribución para estudiantes en la UFRO.

En su Pregrado participó en la Agrupación Estudiantil EmpienZa y fue parte de la organización CLEIN (Congreso Latinoamericano de Estudiantes de Ingeniería Industrial). Luego de un tiempo surgió la posibilidad de postular como voluntaria a una ONG internacional llamada OM Ships International, la cual es su actual trabajo. Camila vive en un barco llamado «Logos Hope», el cual es una embarcación que viaja alrededor del mundo con 400 voluntarios, incluyendo familias de más de 60 países, y  brinda conocimiento ayuda y esperanza a la gente del mundo.

Las tres aristas que tiene OM Ship son las siguientes:

  • CONOCIMIENTO: Logos Hope es una librería flotante con más de 5.000 títulos de libros que vendemos a una fracción de su precio para brindar acceso a literatura de calidad a las naciones que no la tienen. Esto les ha permitido entrar a países cerrados que por primera vez tienen acceso a este material.
  • AYUDA: todos los días se envían equipos a hacer operativos médicos, construcción, donaciones de lentes de lectura, purificadores de agua y también entrenamientos en diversos temas.
  • ESPERANZA: OM Ships es una organización cristiana y queremos reflejar el amor de Dios de una manera práctica.

Su trabajo inicialmente fue en la Librería del Logos Hope, luego de eso se sumó al equipo de preparación avanzada, donde le toca viajar junto al equipo dos o tres meses antes para preparar las visas, los permisos portuarios de aduana, marítimos, containers y otros. También dentro de sus labores está en buscar auspiciadores, reclutar voluntarios y planear eventos. Esto le ha permitido conocer más en profundidad las diferentes culturas, conocer ministros y gobernadores en más de 18 países de Asia, Europa y África en los últimos dos años.

 «No es un trabajo remunerado, pero la experiencia intercultural y personal ha sido la mejor de mi vida. Sin duda la formación de la universidad ha sido fundamental para mi trabajo acá y me ha ayudado a poder ser una mejor Gerente de Proyectos a bordo.» Nos expresó Camila.

Camila y parte de la tripulación del Logos Hope

¿Cómo fue tu estadía en el Pregrado en la UFRO?

Los primeros meses sufrí mucho. Venía de un colegio privado donde no había mucha diversidad de gente y me costó adaptarme a personas con diferentes ideas y trasfondos. Unos meses más tarde me adapté totalmente e hice amigos de todos lados. Me involucré en la Agrupación estudiantil EmpienZa y fui ayudante de inglés, Gestión de Procesos de Negocio. Esto fue una tremenda ventaja ya que antes de recibir el título ya tenía contactos con el “mundo real” y habíamos hecho trabajos que me permitieron conocer más la realidad local

¿Tienes alguna anécdota o si recuerdas alguna situación particular que nos puedas contar?

Cuando organizamos el CLEIN en Pucón y vinieron 1,000 estudiantes de ingeniería industrial de toda Latinoamérica. Unos minutos antes de comenzar las ponencias a mi compañera Francisca Rojas se le rompió el computador con las ponencias adentro y entramos en situación de pánico. Finalmente el computador resucitó y nadie se enteró del terror que pasamos.

¿Algún profesor que recuerdes con cariño?

Muchos. Sr. Jaime Bustos, Martha Ramírez y en general todos los del DIS. Especialmente Natacha Pino quien creyó mucho en mí y me involucró en proyectos de Planeación Estratégica Local y otros que me abrieron los ojos a la realidad en la Araucanía y me ayudaron a tener un cariño especial por el Desarrollo Económico Local.

¿Cómo te enteraste de OM Ships? ¿Y qué te motivó a trabajar allí?

Me enteré por una persona de mi iglesia que estuvo aquí por varios años. Me motivó darme cuenta que puedo desarrollar mi espiritualidad también desde mi profesión. Sentí que dos lados muy importantes de mi vida que estaban separados se juntaron en ese punto.

«Primero aprender a despojarse de lo material y a vivir con poco»

Cuéntanos algunas experiencias significativas dentro de tu trabajo en OM Ships

Como Gerente de proyectos nos toca viajar antes de la llegada del barco a preparar los puertos y luego a su llegada supervisar que lo planificado se esté llevando a cabo. Durante este tiempo tenemos el privilegio de visitar y trabajar con alcaldes, gobernadores y ministros de estado y a veces presidentes. Personalmente he preparado puerto en países como Taiwán, Isla Mauricio, Sud África o Camerún. Después de esto, terminado el proyecto y esperando ser enviada de nuevo, nos toca volver a trabajar en la biblioteca, cocina o limpiando baños. Esta experiencia ha pulido mi carácter y me ha servido muchísimo para valorar cada trabajo.

También recuerdo con especial cariño los proyectos de ayuda que realizamos en Camboya, Mozambique, Filipinas y otros países con tremenda necesidad. Testeando lentes de lectura y enseñando a gente a usar purificadores de agua que pueden prevenir enfermedades y atacar la realidad de que cada 15 segundos un niño muere en el mundo por enfermedades relacionadas con mala calidad del agua.

¿Cómo es un día normal de Camila a bordo? Cuéntanos un poco de tu rutina.

Me levanto a las 7.00. 7.45 nos juntamos todos y tenemos un tiempo de estudio bíblico o entrenamiento de seguridad a bordo. A las 8.30 comienzo a trabajar entre reuniones, con la gente del barco o del puerto. Chequeamos que todo esté funcionando bien y solucionamos problemas que aparecen a diario. No existe la rutina a bordo, pasamos desde controlar 27,000 personas visitándonos en un día (Taiwán) hasta recibir containers, dar entrevistas a medios locales, disfrutar de espectáculos de artistas locales que vienen a mostrarnos su arte, etc. Cuando tengo tiempo libre me pongo mi traje de huasa y me voy a conversar y tomar fotos con los visitantes o salgo a comer comida local y conocer más de la vida en los diferentes países. Cada día a bordo es una sorpresa. Ninguno igual al anterior.

«Cuando tengo tiempo libre me pongo mi traje de huasa y me voy a conversar y tomar fotos con los visitantes».

Podrías darnos tu testimonio o alentar a aquellos titulados jóvenes que quieran participar de esta ONG, o de cualquiera que tenga similitudes.

Creo que uno no debe conformarse a tomar un trabajo solamente porque es bien pagado. La frustración que esto va a significar no tiene precio, yo lo intenté y terminé enferma y frustrada. Pienso que uno debe estar en el lugar que te de satisfacción y que te lleve a cumplir el propósito para tu vida. En mi caso demostrar el amor de Dios de manera práctica. La clave está en encontrar ese propósito y conseguirlo sin miedo a no cumplir las expectativas de nuestra sociedad (posición, dinero, etc).

¿Cuáles son tus planes a futuro?

En septiembre visitaré Chile por 5 semanas luego de 2 años afuera. Va a ser un tiempo de descansar y reconectar con la gente que me ha estado apoyando durante todo este tiempo. A fin de año terminamos el tour por África, vamos a las Islas Canarias y luego navegamos al Caribe y Latinoamérica. En Abril de 2017 termino mi compromiso y vuelvo a Chile. Espero seguir involucrada en la organización de alguna manera y sirviendo ahora desde Chile.

¿Qué cualidad importante debe tener un titulado joven para enfrentar el mundo, en especial en este tipo de organización?

Primero aprender a despojarse de lo material y a vivir con poco. Las prioridades en la vida ya no son comprarse el último teléfono sino adquirir experiencias de vida, que te ayudan a crecer en todo sentido. También, para sobrevivir en una comunidad internacional hay que ser muy flexible, tener la capacidad de adaptarse a diferentes culturas y cosmovisiones y entender su forma de actuar a partir de sus historias y contextos de vida y no ofenderse rápidamente. Y por último, mucho sentido del humor. No hay mejor forma de adaptarse que reírse de sus costumbres extrañas y de las propias. Te das cuenta que somos más cercanos de lo que creemos a alguien que vive en Bangladesh o Mozambique y que finalmente la necesidad de todo el mundo es la de relacionarse y de ser amado. Eso es transversal a las culturas y costumbres.

¿Qué te parece que la UFRO tenga una instancia como Círculo de Titulados?

Me parece excelente poder conectar con personas con las que compartimos un proceso tan lindo como fue la universidad y poder ver y aprender de dónde estamos y los diferentes caminos que hemos seguido.

Camila en uno de sus viajes por el Sudeste Asiático